Hay voluntad para el debate migratorio - Inmigración, ciudadanía y leyes - impre.com

Antonieta Cádiz/antonieta.cadiz@laopinion.com |2011-04-20 |

WASHINGTON, D.C.— Un nuevo encuentro sobre inmigración culminó ayer en la Casa Blanca, con el compromiso de reavivar el debate sobre el tema a nivel nacional, pero sin resultados, en cuanto a medidas de alivio administrativo inmediato para la población indocumentada.

Cerca de una hora se extendió la reunión entre el presidente Barack Obama y unos 40 líderes de diversos sectores, entre los que figuraron grupos religiosos, sindicatos, de negocios y políticos. Junto a ellos, miembros de su gabinete como la sdecretaria del Trabajo, Hilda Solís; de Seguridad Interna, Janet Napolitano, y el Procurador General, Eric Holder.

El gobierno convocó al encuentro en un contexto político interesante. Hace unas semanas el presidente anunció el inicio de su campaña para la reelección en 2012. Una meta para la que necesita el voto hispano.

Durante el liderazgo de Obama ha habido un diálogo constante con el Congreso para impulsar esta área, a nivel privado, así como por empujar votos como el que se dio en diciembre con DREAM Act. No obstante, la política, sin duda, también es parte de la ecuación actual.

La reunión se realizó en medio de una presión pública creciente de parte de grupos pro inmigrantes, por aplicar medidas de alivio administrativo para la población indocumentada.

Pasos que a puerta cerrada se han enunciado en términos concretos. En una carta enviada el 18 de marzo pasado a Napolitano, obtenida por La Opinión, 17 organizaciones entre las que se encontraba la Conferencia de Obispos Católicos y el Consejo Nacional de la Raza (NCLR), pidieron cambios específicos.

Entre las medidas propuestas en la misiva se mencionó el congelamiento de programas como 287g, el avance de reformas en los centros de detención, las que fueron anunciadas por el gobierno en 2009, pero que han experimentado una serie de retrasos.

Asimismo, se recomendaron modificaciones en el sistema de detención de indocumentados, debido a una serie de falencias en el proceso mismo y la forma en que los agentes ejecutan arrestos a nivel local. Un plan en sintonía con lo propuesto por 22 senadores, la semana pasada, en la carta enviada al presidente Obama.

Consultado respecto a resultados específicos en torno a estas peticiones, Ali Noorani, director ejecutivo de National Immigration Forum, aseguró que el mandatario dijo que "daría una mirada seria a las recomendaciones, pero no se pronunció al respecto, ni entregó señales específicas".

"Le plantearon el tema de aplicación de medidas administrativas, pero ellos también entienden que hay límites en lo que el presidente puede hacer y que la meta real tiene que ser legislación", explicó Cecilia Muñoz, directora de asuntos intergubernamentales de la Casa Blanca.

Por otro lado, asistentes al encuentro mencionaron el inicio de una campaña liderada por el mandatario para incentivar el debate a nivel nacional.

"No dio fecha de inicio, pero pienso que comenzará en las siguientes semanas. Nos dijo que iba a impulsar una campaña para llevar el mensaje al pueblo estadounidense. Que va a viajar. Lo mismo que hizo con la campaña de salud, hablar en diferentes foros y comunidades para explicar la importancia de esto", aseguró Eliseo Media a La Opinión, vicepresidente ejecutivo internacional de SEIU.

"Se comprometió a poner tanta energía en la promoción de una reforma migratoria como lo hizo con la reforma de salud", dijo Noorani.

"Dejó claro que no se puede avanzar mientras no se toque el corazón de los estadounidenses", dijo a La Opinión Eric Garcetti, concejal de Los Ángeles.

En su reporte oficial respecto al encuentro, la Casa Blanca especificó que se intensificarán los esfuerzos por encabezar un debate cortés sobre el área en las próximas semanas y meses. Asimismo, se reiteró que no se puede tener éxito si el mandatario lidera el debate solo.


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